sábado, 13 de junio de 2015

Caminante

Sus primeros pasos sostenidos, gritados y continuados fueron a los 14 meses y 3 días. Tras varias charlas con mamás de niños más grandes que Tomás, supe que iba a tener que aprenderme fechas como esas. Cuando les preguntaba o salía el tema de "¿cuándo empezó a caminar?" todas decían mes, día y hora en que la cría había levantado vuelo. O caminata en verdad.

Pero la realidad es que Tomás ya venía dando pasitos hace meses, agarrado de mesas, sillones, personas o lo que le sirviera para tal fin. A veces tomado de las manos de los abuelos y muy pocas veces de las manos de los padres (era agarrarlo yo de las manos para que se tirara al piso o llorara para que lo levantara a upa).

Cumplidos los 14 meses, estábamos en lo de sus abuelos cuando el botija empezó a largarse de un sillón al otro, y al otro, y al otro. Y en cada sillón era recibido por los brazos y los besos de sus padres, de su tía, de su abuela. Risas, alguna caída por aceleradas imprevistas, gritos... y el inicio de esta carrera sin fin.

Muchos me habían adelantado que me preparara para cuando empezara a caminar, que iba a "estar atrás de él todo el día" (como si ya no lo hiciera de antes). Convengamos que mucho no cambió. Ya antes de caminar, se paraba y trepaba por todos lados y por lo tanto tengo bien entrenado el "¡NO!". 

La única diferencia tal vez sea que ahora él disfruta más de su propia independencia. Ojo, nosotros también. Pero ahora se despierta, nos mimosea un rato, se tira arriba mío, me tira el pelo... y cuando se aburre se baja de la cama y sale caminando. Se ve tan linda esa silueta parada bajo el marco de la puerta, recibiendo la luz que llega de la calle. ¿Cuándo nos pasó esto de ser tan felices?

Parezco una idiota recomendando tener hijos. No busco evangelizar a gente que no quiere ni ahí saber nada de tener un bebé, pasar por un embarazada o ser papá. Pero a aquellos que me preguntan, que están en la duda, que quieren pero no se animan o están esperando "algo", muchas veces les digo que no pierdan oportunidad, que no esperen el momento ideal porque evidentemente no existe. Si tenés ganas, si querés... ¡el momento es AHORA!

P.D.: tengo pendiente el post con los detalles del cumpleaños. Salió todo tan lindo y laburamos con gente tan genial, que no quiero dejar de recomendarlos. Ya se viene ehhhhhhhhhhhhhhh...